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Canales y Othón Ruiz dicen ignorar anomalías en remate de bienes de NL |
Ismael Romero y David Casas/Enviado y corresponsal El Universal Jueves 08 de junio de 2000 |
Vendieron un predio valuado en 120 mdp en tan solo 53 mdp; el gobernador es socio de la empresa que lo adquirió |
MONTERREY, N. L. El gobernador panista, Fernando Canales Clariond, y el director general del Grupo Financiero Banorte, Othón Ruiz Montemayor, dicen no saber cómo fue posible que en el proceso de remate de bienes del estado para saldar la deuda con instituciones bancarias se haya entregado un predio de más de 140 mil metros en 53 millones de pesos, cuando existía un avalúo de este inmueble por 120 millones de pesos. Canales finiquitó la entrega de más de 600 bienes inmuebles públicos, propiedad de Nuevo León, proceso que había iniciado en 1997 su primo, el entonces gobernador priísta Benjamín Clariond Reyes-Retana, para rebajar la deuda estatal por más de 8 mil millones de pesos con Banorte, Serfín y Banpaís. El predio en cuestión colinda con la planta de Aceros Planos de Monterrey, subsidiaria del Grupo IMSA, de la cual son socios Canales Clariond y Benjamín Clariond. En 1998 este predio fue vendido por Banorte a aquella empresa, en una operación que se cerró en 60 millones de pesos. A pregunta expresa de EL UNIVERSAL, el mandatario panista no quiso entrar en detalles pero ofreció que la tarde de este miércoles su tesorero Fernando Elizondo Barragán daría toda la información; no hubo respuesta del funcionario, de acuerdo con lo ofrecido por su jefe. Canales aseguró únicamente que ?fue una operación conveniente para el gobierno del estado? pero no supo explicar por qué un terreno valuado en un precio se remató a menos de la mitad a una empresa de la que él es socio. Othón Ruiz Montemayor, quien en 1996 recibió, como tesorero del estado, predios de la nación para agregarlos al patrimonio nuevoleonés y que después vendió uno de ellos, el adquirido por APM, en su condición de funcionario de Banorte, negó en un principio que él hubiera participado en aquella primera recepción de bienes. Se trata de 19 inmuebles que pertenecían a Fundidora Monterrey, empresa que fue declarada en quiebra el 8 de mayo de 1986. Estas propiedades fueron cedidas por el presidente Miguel de la Madrid al entonces gobernador Jorge Treviño. Las escrituras de esta donación se formalizaron hasta el 6 de mayo de 1996, durante el interinato de Benjamín Clariond Reyes-Retana y en cuyo equipo de trabajo colaboraba Ruiz Montemayor como secretario de Finanzas y tesorero general del estado. Fue necesario mostrar al ejecutivo de Banorte la escritura donde consta su firma de esa recepción para que recordara el hecho. ?Si usted me dice que los terrenos de la fundidora los recibí junto con Benjamín Clariond, no sé de dónde haya sacado esa loquera. ?Aquí está la escritura ( folio 2381 del Registro Público de la Propiedad de Nuevo León) y aquí está su firma con la que consta que usted recibió esos bienes junto con Benjamín Clariond. ?¡Ah!, bueno, se formalizó hasta entonces. El que dio los terrenos de la fundidora fue Miguel de la Madrid a Jorge Treviño y nunca se escrituró sino hasta esa época. Supongo yo que eso sea. ?¿No hay un problema ético cuando usted, después de haber firmado de recibido esos bienes de la nación, como funcionario estatal, actúa después como parte vendedora de los mismos a una empresa que pertenece a la familia Canales-Clariond? ?No, para nada, porque cuando el gobierno del estado de Nuevo León, por conducto del gobernador Clariond y con autorización del Congreso del estado dio esos predios en pago, nosotros como banco los recibimos y pasaron a pertenecer al patrimonio del Fobaproa, porque la deuda que tenía el gobierno de Nuevo León con el Banco Mercantil del Norte (Banorte) se la habíamos vendido al Fobaproa. Entonces, nosotros recibimos esos predios por cuenta y orden del Fobaproa. Cuando se venden, se hace con dos autorizaciones, la de un comité interno del banco y la del Fobaproa. Fue una venta que se hizo, por parte del banco, como administradora y no como propietaria. Yo no intervine en eso, más que jurídicamente. Aquí hay una escritura (52 mil 402 del Registro Público de la Propiedad de Nuevo León) en la que usted aparece como ?parte vendedora?. ?Sí, porque yo tengo los poderes. ?¿Usted no planteó al banco que podría haber un problema ético, porque siendo usted funcionario público había recibido bienes que ahora iba a vender? ?No, no, no, porque no lo había. Nunca lo hubo. El banco toma su determinación de vender al mejor postor a través de un proceso de licitación y con base en su normatividad interna... Yo tengo el poder, soy la persona apoderada para llevar estas cosas pero yo no participé ni en la presentación ni en la propuesta. Aquí se venden terrenos todos los días, específicamente, todos los lunes. Entonces, es una cosa que se hizo conforme a los procedimientos normales que tiene la institución. Se recibieron las licitaciones y se escogió la más alta. ?¿Usted no advirtió al banco que podría haber algún problema, alguna suspicacia por haber participado en una recepción de bienes nacionales y, después, en la venta de los mismos a un particular, como funcionario de la institución? ?No, yo no me di cuenta... El que nada debe nada teme. Yo no me di cuenta. Ni me di cuenta a qué hora se hizo, ni en cuánto se hizo, ni conozco la transacción. ?Hay muchas suspicacias en este hecho. ?Sí, a la gente le gusta ese rollo. ?Y se habla de posibles beneficios girados en beneficio de la familia Canales-Clariond. ?Bueno, ya estoy enterado de algunos comentarios que han salido en la prensa, sobre todo en algunas columnas que quieren aprovechar la situación electoral y hacer leña del árbol caído y del gobernador Clariond y de todo eso. Pero realmente la transacción está auditada por la Comisión Bancaria y de Valores, está aprobada por el Fobaproa y por el comité interno del banco. No hay más que un conjunto de coincidencias. ?¿Porqué no se hizo un avalúo del predio antes de que el banco lo vendiera a APM? ?Seguramente sí se hicieron. ?No hay constancia en el Registro Público. ?A lo mejor los avalúos no se hacen constar en escrituras públicas pero seguramente se hizo y se dieron las propuestas. ?¿Usted sabía que de ese terreno existía un avalúo de 120 millones de pesos y que se le entregó a Banorte en 53 millones? ?No. Ni sabía, ni creo que sea cierto. ?Hay un avalúo del despacho Farías Montemayor y Asociados que está anexo a las escrituras. ?No, no, no me interesa, lo pudieron haber hecho por ahí. ?Aquí está y consta en el Registro Público de la Propiedad. ?Pues no lo sabía, ni tengo la menor idea.
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